El domingo pasado, leí una nota muy interesante en la revista del diario La Nación que pienso puede servir para abrir un debate.
La temática gira en torno a la mujer, sus diferentes roles y los espacios que viene intentando ocupar en la sociedad. El punto que me ha parecido interesante es que, como las caras de una misma moneda, aquellos supuestos "logros" alcanzados, para muchas mujeres, pueden ser un arma de doble filo que las llena de frustración y sobrecarga de responsabilidades. Para muchas, no todo lo que brilla es oro y tienen que vérselas a diario con la diferencia de géneros que sigue existiendo.
No pretendo abrir un debate feminista sobre el tema (y creo que tampoco quiso hacerlo la autora del artículo) si no plantear la realidad que se le plantea a las mujeres que deben hacer coexistir (cual pulpo) todos los aspectos que implican ser MUJER.
El artículo se llama: Chicas Superpoderosas. Aquí les dejo el link para que accedan quienes estén interesados
La temática gira en torno a la mujer, sus diferentes roles y los espacios que viene intentando ocupar en la sociedad. El punto que me ha parecido interesante es que, como las caras de una misma moneda, aquellos supuestos "logros" alcanzados, para muchas mujeres, pueden ser un arma de doble filo que las llena de frustración y sobrecarga de responsabilidades. Para muchas, no todo lo que brilla es oro y tienen que vérselas a diario con la diferencia de géneros que sigue existiendo.
No pretendo abrir un debate feminista sobre el tema (y creo que tampoco quiso hacerlo la autora del artículo) si no plantear la realidad que se le plantea a las mujeres que deben hacer coexistir (cual pulpo) todos los aspectos que implican ser MUJER.
El artículo se llama: Chicas Superpoderosas. Aquí les dejo el link para que accedan quienes estén interesados
2 comentarios:
Bueno el articulo, es cierto que la sociedad es machista. Y mas alla del problema de genero, existe la realidad que la mujer se ha encargado de construir su femeneidad por el mismo camino que el hombre construyo su masculinidad, por decirlo de alguna manera, compitiendo en ambitos, naturalmente masculinos. Ocupando puestos de jerarquia a un menor valor de mano de obra mas barato que ha denigrado esa posicion, obligando al hombre (soporte natural del hogar), a bajar sus espectativas, y negociar desde una base muy baja su ingreso. Tal vez el precio que paga la mujer con el exito, es quedarse sola tambien.
Absolutamente interesante tu comentario. Tal vez, sin darse cuenta, la mujer entró en una lucha por el poder que ostentaba el hombre sin darse cuenta de que igualar, en ese sentido, la llevaba a desentenderse de sus otros roles y deseos. Y, como decis, este fue el precio a pagar. Hoy por hoy, en mi consultorio, todo esto se escucha mucho. Es probable que sea el momento de plantearse que luchas tienen un real sentido para cada una de nosotras y en cuáles nos embarcamos por un mandato social revolucionario, por llamarlo de alguna manera.
Muchísimas gracias por tu aporte!
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